La New Age
Muchos autores no han podido dar con los orígenes exactos
de la New Age. Se les ha hecho muy difícil poder ver cuáles son las verdaderas
ideas y prácticas que constituyen este fenómeno, muy desconocido por todos en
gran medida a pesar de todas las investigaciones que se han hecho.
Lamentablemente, los que se autodenominan “expertos” en el tema, siempre caen
en la interpretación personal del mismo y muchas veces rayan en la
exageración total, algo que lleva a que muchos pierdan el interés y sean más
propensos a caer en dichas trampas. Para dichos investigadores, es muy difícil definir
su identidad ya que están mirando todas las ramas a la vez y no están mirando
fijamente al árbol en su plenitud. Al no tener una idea clara, se acercan, pero
aun así se quedan en un mismo sitio. Ven algo que no tiene forma ni
organización definidas. Son tantas las áreas que invade el New Age que suelen
verlo como un movimiento de “modas”. Eso sí, podemos coincidir en que es algo
que se sabe camuflar y puede cambiar de forma constante y puede ser bien
variable pero no viene con nuevas ideas ni cosas que no se hayan visto en el
pasado. Tal vez parecen nuevas para esta generación, pero no se diferencia de
lo que se ha hecho en la antigüedad.
Su fin es claro, volver a instaurar el paganismo con una
diversidad incontable de creencias y supersticiones. Pasa de forma encubierta
frente a nuestras propias narices y no parece algo que nos deba preocupar. Pasa
como algo común, algo de todos los días, como si fuera meramente “natural”. El
elemento que usa como símbolo es el agua, por eso se refieren a la New Age como
“La Era de Acuario”, la que supera a la “Era de Piscis”. Aquí observamos que el
símbolo de Piscis es el pez y el pez es simbolismo cristiano. Cuando se dice
que “supera” a la era de piscis, lo que se refiere es a que la era cristiana
queda atrás para dar comienzo a una era espiritual sin Cristo como Salvador del
mundo.
Muchos indican que la New Age viene de la nueva Teosofía
(Sociedad Teosófica) fundada por Helena Blavatsky, líder espiritista y médium.
También fue cofundadora de grupos de neobrujería en Europa. Pero la realidad es
que la New Age viene de mucho más atrás.
La New Age es un sistema ya que se compone de diversas
ideologías, medios, rituales, etc. Son muchas cosas en una sola. Por eso, los
investigadores miran sus ramas, pero no pueden ver el resto que compone ese árbol
y cuando hablamos de un árbol, sabemos que no podemos hablar de tal cosa sin
entender que todo árbol tiene unas raíces y un tronco que lo compone y ese
tronco se divide luego en muchas ramas, pero todo viene de un mismo sitio.
Cuando decimos “New Age”, debemos entender que ese es el
árbol. Dentro de ese árbol, una persona puede moverse a la rama que desee y
luego regresar y moverse después a otra rama sin ningún problema. Dentro de ese
árbol aparecen múltiples opciones para que la persona elija dónde quiere estar,
cuánto tiempo desea quedarse allí y cuándo puede cambiar a gusto.
La New Age está compuesta de todas las herejías
existentes en la historia, hechas presentes en la actualidad. Tiene también
todos los elementos de los antiguos paganismos, que son las raíces y su base,
que es el tronco, es el conocimiento (gnosis) que quiere hacer creer a todos que
viene a salvar a la humanidad.
Inicialmente, un grupo de judíos que eran de la estirpe
de los fariseos, al ver que no pudieron acabar con el cristianismo, decidieron
hacer un juramento y acuerdo el cual dictaba que donde estuviera presente el
cristianismo, allí estarían ellos para entorpecer. No tenían un nombre
específico, solo se autonombraron como “La Fuerza Misteriosa”. Sus creencias de
la cábala la mezclaron con paganismos antiguos y crearon la idea de que el
hombre solo se salvaría por el conocimiento. A todo esto, esa fuerza misteriosa
comenzó a llamarse “La Gnosis”.
La gnosis siempre se distinguió por asumir una postura
camaleónica, o sea que asumía la imagen aparente de donde estaba, pero
realmente era otra cosa. Tergiversaron el evangelio y blasfemaron contra el
Espíritu Santo. Se pusieron el antifaz para que muchos creyeran que eran
cristianos, de esa forma, bajo el engaño, lograron contaminar la fe cristiana
con ideas que eran contrarias a las enseñanzas de Cristo. Engañaron a muchos e
hicieron que apostataran contra la fe cristiana. Por eso, cuando escuchamos a
los gnósticos hablar, siempre los escucharás diciendo que ellos fueron los
“verdaderos” cristianos, cuando realmente nunca lo fueron. Siempre se movían en
las sombras y movían a su gente para pervertir las mentes de las buenas
personas. Fueron los precursores de muchas herejías en la historia y debido a
que eran condenados por los mismos cristianos, asumían luego otros nombres y
formas para pasar desapercibidos.
Durante la historia, la gnosis pasó con el nombre de
cátaros, albigenses, teosofía, más tarde rosacruces y terminaron como la
masonería. La gnosis fue la que influyó en la mente de Martín Lutero ya que
trajo división. Por eso vamos a ver que la masonería utilizará siempre el
protestantismo como una herramienta para dividir todos los territorios que
fueron católicos desde hace siglos.
Vimos las raíces, vimos el tronco y estamos viendo ahora
sus ramas. Todo es una misma cosa, gnosis. Pero la rama más fuerte, o sea la
fachada más fuerte de la gnosis ha sido sin duda alguna la masonería.
La masonería fue la que engendró las revoluciones para
destruir el cristianismo, tal como lo juraron aquellos del culto de la “Fuerza
Misteriosa” muchos siglos atrás. Fue bajo la revolución masónica francesa,
donde acuñaron la expresión “La Nueva Era de la humanidad” ya que asumían que
era el final del cristianismo. Muchas otras revoluciones se llevaron a cabo y
todas usaron la mentira, la trampa, el engaño. Características de la gnosis
misma.
La masonería siempre ha permanecido actuando contra la
Santa Iglesia y así lo plasmaron en las “Instrucciones Permanentes de la Alta
Vendita”. La masonería aseguró su agenda en ese escrito de infiltrar a la
sociedad cristiana y a la Santa Iglesia.
A mediados del siglo XX, la masonería en Estados Unidos
divulgaba una revista titulada “New Age”. En esa revista se instruía a los
masones con doctrinas y consejos, con ideologías y programas para que se fuera
organizando un movimiento que lo abarcara todo. Y es aquí donde encontramos que
la madre putativa de la New Age es la masonería.
El hecho de que hayan elegido el símbolo de acuario es
porque este símbolo se representa con un hombre vertiendo el agua de un
cántaro. El agua es un elemento natural que no importa donde caiga, asume la
forma de su recipiente. Por eso, la New Age es un sistema que abarca todo, lo
inunda todo y asume una forma aparente, dependiendo de donde caiga. Por eso
vemos que es bien parecido al pensamiento masónico, el cual enseña que puedes
creer en algo, lo que tú quieras, puedes asumir lo que tú quieras y como quiera
está bien. Todo es permitido, o sea es sincretismo puro.
La New Age es el pensamiento masónico y gnóstico a nivel
macro, por eso ya no es tan importante iniciarse en la masonería porque la
sociedad está contaminada con ese pensamiento gracias al sistema de creencias de
la New Age. No es una moda, porque se mantiene persistente para dinamitar la fe
de los pueblos cristianos. El protestantismo expresa el pensamiento del New
Age. El protestantismo decreta y afirma con convicción tal cual la New Age
enseña bajo la doctrina del Secreto, el cual establece que, si la persona le
pide y le ordena al universo, lo decreta con poder, de esa misma forma el
universo se lo devuelve.
La masonería enseña que no importa que digas universo,
buda, Cristo, Dios, Krishna, etc. Te estás refiriendo a una misma fuerza
universal. Por eso, el protestantismo, cambia Universo por Dios o “Jehová”,
porque al final, decir Dios o el Universo es referirse a lo “mismo” y, por lo
tanto, hay que decretarle a Dios. El protestantismo es el instrumento por excelencia
de la masonería y forma parte de la New Age.
El New Age se presenta con tal sutileza que ya hemos
podido observar que se puede llevar el paganismo a los jardines del Vaticano y
nadie se escandaliza. O sea que se puede adorar a la Pachamama en los aposentos
del Vaticano y aquí no pasó nada. Lo curioso es que quienes se levantaron en
contra de eso fueron silenciados con majestuosidad.
La New Age aborrece la tradición cristiana, al igual que
la masonería, ya que la tradición católica es base firme del cristianismo y no
puede ser derrotada. Por eso observamos que la misa tridentina o la Misa de
Siempre, se ha querido suprimir en estos últimos dos años. Gracias a la
“plandemia”, muchos encontraron la misa tridentina en YouTube y vieron que,
mientras donde se daba la Misa Novus Ordo o Misa Nueva se cerraban los templos,
los templos donde se ofrece la misa de siempre nunca cerraron. Las personas
comenzaron a buscar dónde podían acudir a esas misas y las misas tridentinas
comenzaron a llenarse. Nadie se infectó con el virus, mientras donde se daba la
misa nueva había un acto sacrílego de tratar a la eucaristía como un simple
símbolo, donde la gente se tenía que “desinfectar” las manos para no infectarse
al recibir en sus manos el cuerpo de Cristo. Ya el recibir la comunión en la
mano puede significar un fuerte sacrilegio.
En las altas esferas, todos esos que tienen el corazón
inundado de la New Age, o porque son masones infiltrados, comenzaron a
presionar a papa Francisco y terminamos con el decreto papal de que las misas
quedaban suprimidas y solo se podían ofrecer con permiso exclusivo desde el
Vaticano. La misa tridentina fue prohibida oficialmente en la Basílica de San
Pedro y solo se puede ofrecer en una estructura pequeña, para que no quepa
mucha gente. A mediados de 2022 se volvieron más rígidas las directrices para
suprimir más las misas tridentinas.
Vemos aquí que todo este sistema ha logrado conseguir lo
que plasmaron en aquel documento los masones. Si no pueden hacerlo
directamente, lo harán influyendo las mentes y corazones de la curia. Es
preocupante por demás que ese mismo sistema masónico New Age es el responsable
del deterioro moral, espiritual y humano de la sociedad. Las sociedades se han
vuelto ateas, la educación en las escuelas no puede enseñar nada sobre Dios,
pero sí pueden hablar de conductas aberrantes como si fueran buenas. Desde la década
de los 60 y 70, esa revolución sexual donde ahora la familia no tiene espacio,
ahora debe ser un “amor” “libre”. Dio como resultado la disfunción de las
familias y por consiguiente la disfunción de la sociedad. Sin Dios como un
norte y sin Dios como nuestra base de vida, la sociedad a sucumbido a muchos
actos iguales o peores que los que se cometían en Sodoma y Gomorra. Todo lo que
trae la New Age es luciférico porque enseña que Lucifer debe retomar el poder
que se le quitó y ese pensamiento viene desde la gnosis misma.
La New Age tenía como meta paganizar a la sociedad y
ahora su misión es hacer que se mantenga el paganismo enraizado en la mente de
las personas. Se han minado todos los valores y principios cristianos y se les
ha querido sustituir por valores y principios meramente humanos, vacíos en su
totalidad.
La New Age trajo como consecuencia el vacío existencial
humano. Luego trajo el aumento de la presión social pagana. Se produjo un vacío
tan grande que comenzaron a aumentar los problemas y trastornos mentales,
emocionales y espirituales. A tal punto ha llevado al hombre en un vacío
profundo, que el ser humano vive deprimido, lleno de odio consigo mismo y
contra Dios. La New Age que venía presumiendo que iba a salvar al hombre por el
conocimiento, ahora resulta que lo que realmente trajo fue el infierno mismo
sobre la tierra. Por eso vemos que muchos no encuentran respuesta a sus
desesperos y terminan atentando contra aquello que Dios nos ha regalado y que
es lo más sagrado, la vida.
La New Age trae por consiguiente la cultura de la muerte.
Ha degradado tanto al hombre, que ahora la vida la desprecia y así como hace
que muchos deseen dejar de vivir, así también lleva a muchos a querer
deshacerse de la vida de los demás. Ha desarrollado una psicopatía humana,
donde la vida del prójimo la ve como despreciable y como consecuencia vemos que
impone el aborto y la eutanasia.
Todos estos grupos que se autoproclaman como
revolucionarios de una pseudocausa, son productos de la New Age. Todos esos
grupos o como se auto nombran, colectivos, desprecian la vida humana y su
propia naturaleza. Sexo desenfrenado, sexo desordenado, todo apetito carnal es
bienvenido. Pero a la vez, ese sistema convence a esas personas que se
desprecian a sí mismas a ir en contra de su propia naturaleza, tal como Dios
los creó. Y en un acto de “no serviré”, tal como Lucifer, se levantan contra su
propia naturaleza y se vuelven a actos impuros hasta el punto de querer
mutilarse para querer ser lo que no son naturalmente.
El sistema New Age es antihumano, busca que la humanidad
se destruya a sí misma y por eso observamos que se permite acabar con la vida
de los no nacidos, se quiere convencer a las personas que pueden ser lo que no
son, que pueden mutilar su naturaleza y que si no están satisfechos con todo
eso se pueden quitar la vida. Es un odio profundo contra la humanidad misma. Es
lo mismo que pregona la antigua gnosis que repudiaba el matrimonio, que veía
repulsiva la procreación y veían a los niños no nacidos como demonios impuros.
Veían la humanidad como algo asqueante y eso es lo que vemos en la New Age.
Es la soberbia y el egoísmo en su máxima expresión
humana. La New Age no es un conjunto de modas inocentes, ni un movimiento que
viene a satisfacer ese vacío que causa. La New Age viene a destruir al ser
humano en todos los niveles. Espiritual, emocional, psicológico, físico, social
y un largo etc.
La New Age es el vaho de la masonería al que se refería
Padre Manuel Guerra, ese vapor de algo que no se ve pero que sabemos que está
allí y lo inunda todo, lo afecta todo. No es algo inocente como nos lo quieren
hacer creer. Su fin es desechar al ser humano, pero para eso debe hacer que el
ser humano se aleje de Dios licuando su fe, adormeciendo sus creencias,
mostrándole ideas y creencias que pueda mezclarlas con las suyas y al final
llevarlo a que no crea en nada, porque en realidad la persona termina dándose
cuenta de que todo eso que se le presenta como apetecible, no le llena ese
terrible vacío que yace muy dentro de él, ya que al alejarse de Dios no puede
hallar consuelo alguno. La persona entra en un desespero y aún así ese mismo
sistema lo lleva a seguir buscando muchas otras cosas para que no tenga retorno
a Dios, para que se despedace y al final se autodestruya.
El New Age es satanismo puro y detrás de este viene la
neo brujería y el satanismo como lo conocemos. Gracias a este sistema, el nivel
de natalidad ha disminuido drásticamente en nuestros países occidentales. Eso
nos vuelve en presa fácil para los enemigos de la fe que bordan nuestras
fronteras. Nuestras sociedades envejecen a pasos agigantados y el enemigo islámico
se nos ha metido en nuestros territorios y mientras se hace pasar por “amigo”,
nos está invadiendo por el vientre de sus mujeres.
Ellos son importantes para la fase final de la
descristianización porque para el iluminismo masónico el fin justifica cualquier
medio. La New Age es solo una herramienta que les permite acelerar lo que no
pueden hacer individualmente.
Por eso, la New Age, ha logrado conquistar los medios de
entretenimiento, la política, la tecnología, la educación y muy lamentablemente
la fe cristiana.
Exhortamos a todos los católicos, y no católicos, a abrir
los ojos y observar que no estamos en un estado de flores y lucecitas
brillantes. Estamos sumergidos en un caos, un caos que la masonería ha creado
para confundir a la humanidad y gracias a eso poder traer su Nuevo Orden a
nivel mundial, un orden donde nadie tendrá libertad y solo seremos esclavos de
unos pocos que sirven a Lucifer mismo.
La pregunta es, ¿seguiremos como si nada y dejaremos que
ellos sigan avanzando?
A todo cristiano católico, nuestra Santa Iglesia siempre
nos dio las herramientas para luchar contra los impíos. Tenemos el poder de la
oración, tenemos el santo rosario que es más filoso que una espada de doble
filo y tenemos nuestra fe que es nuestro mayor escudo. No nos dejemos vencer
por un grupo de dementes y trastornados, no nos dejemos vencer por psicópatas
que saben que son pocos y no les conviene que sepamos que nosotros somos más
que ellos. Nuestro poder radica en pasar la voz, ayudar a otros a salir de los
errores donde han caído por este sistema y seamos firmes como aquellos
caballeros de la antigüedad que vencieron a los que querían invadirnos por
medio de la espada. Cultivemos esa misma valentía y demostrémosles que ellos no
son los que mandan en este mundo donde Dios nos ha dado la gracia de vivir.
Lucha con la espada de la verdad. No permitas que su
imperio se siga expandiendo.